Por eso mismo a veces me canso y me agoto... y cuando llegan los días de verano, todo queda al descubierto ya que entonces no encuentro nada con lo cual pueda tapar lo que siento... Todo cambia y es como si en realidad fuese yo mismo quierendo ser otra cosa, fingiendo ser un mueble o el color de mis paredes.

Me sirvió para conocerles, para darle la información que tanto tiempo estuvo en cautiveria, y de alguna manera, aumentó la imensa dicha que mi desgracia a llevado tras de sí. Con enterarme mejor de las cosas, supuse que soñarse solo no es un sacrilegio insufribe, es más, tal vez habría sido mucho más útil si lo hubiese hecho antes. Después de todo, sé muy bien que más adelante todo tendrá sabor a Valparaíso. Ya no les reconocía, los escalones sólo fueron parte del sueño y su luz fue cuanto me acompañó en mi descenso. Ahora sólo queda acostumbrarse.

Cuántos años tines? 16? y tan gruñón a esta edad? Lo que a ti te pasa, es que no tienes confianza. Tienes amigos Bruno? no, eso no es de tu interés. Tú sólo vives para enojarte.

Nos Extraño.

Es incorregible, para todos y para mí se nos hace imposible de reparar. Irreversible tal vez, lo que sea habrá abreviarlo. Extenderlo es demasiado extenso, no podemos darnos tal lujo, sería lujoso en caso contrario. Lo que sé es que fueron dos causas las que lo causaron. La primera fue culpa mía, y al decir que fue mi culpa declaro que yo mismo fui el responsable. De lo segundo, aquello consiguiente a lo primero, es un factor de cuyos efectos ya ni recuerdo. Había dicho que nos extrañaba, que ya separados ahora no estábamos juntos. Quiso borrarse algunas palabras, abreviarlas con tal de no malgastar el lujo.
Ella sabía que habían sido dos causas, la primera antes que la segunda, significado y significante a la vez que compactas. El significado era mi responsabilidad, y al decir que era responsabilidad mía anuncio de inmediato que los efectos fueron mi culpa. Del significante, aquello yuxtapuesto al significado, es un efecto de cuyos factores no he podido olvidar.